Para el análisis experimental de esfuerzos y deformaciones se emplean galgas extensométricas con el fin de determinar esfuerzos o tensiones en componentes y estructuras. Las tensiones máximas que se presentan son magnitudes decisivas para el diseño y fijan, en última instancia, las dimensiones de un componente. La técnica de medición con galgas extensométricas proporciona los valores medidos de deformación necesarios para el cálculo de tensiones mecánicas.
Con el equipo de ensayo FL 120 se puede medir la flexión y la deformación de un disco sometido a diferentes esfuerzos de compresión. Para esto se sujeta de forma fija un disco delgado, también llamado membrana, y se somete a presión.
Un cilindro con émbolo de accionamiento manual genera la presión por medio de un sistema hidráulico sin mantenimiento. Esta presión se indica en un manómetro. Galgas extensométricas registran las deformaciones que se producen en la superficie de la membrana. La disposición de las galgas extensométricas en puntos elegidos óptimamente proporciona una buena visión de conjunto de la evolución de los esfuerzos y las tensiones que actúan en el disco.
Las tensiones máximas producidas se calculan aplicando la ley de elasticidad. Los valores de medición de las galgas extensométricas se registran e indican por medio del amplificador de medida FL 152. Como ayuda y para una representación ilustrativa del análisis del ensayo, los valores de medición pueden ser adquiridos por el software de aplicación.
Al mismo tiempo, se mide la flexión de la membrana con un reloj de comparación. Este reloj de comparación se puede desplazar sobre un travesaño, siendo así posible realizar mediciones en cualquier radio que se desee.