Las instalaciones frigoríficas más pequeñas por lo general están equipadas con un compresor de émbolo. El compresor de émbolo pertenece a las máquinas de desplazamiento positivo. Estas máquinas se diferencian claramente de las máquinas de flujo, a las que pertenecen los turbocompresores que son habituales en las instalaciones de gran tamaño.
En los compresores de émbolo, el caudal depende en primer lugar de la cilindrada y del número de revoluciones. Debido al inevitable espacio muerto, el caudal disminuye con una tasa de compresión creciente. Como el caudal es una medida para la potencia frigorífica de la instalación, las características del compresor son importantes para la potencia de toda la instalación frigorífica.
En este banco de ensayos se utiliza un compresor de refrigerante abierto habitual que es accionado por aire en un proceso abierto. La presión de entrada y de salida y, por tanto, la tasa de compresión se pueden ajustar por medio de válvulas en rangos muy amplios. El accionamiento a través de un convertidor de frecuencia posibilita números de revoluciones variables. Las presiones, temperaturas, potencia eléctrica absorbida, número de revoluciones y par de giro son registrados. Los valores medidos se pueden leer en displays. Los valores se pueden almacenar y procesar con ayuda del software para la adquisición de datos adjuntado. La transferencia al PC se realiza a través de una interfaz USB.