Las bombas con motor provisto de diafragma se utilizan ante todo en la ingeniería de procesos para transportar líquidos agresivos, tóxicos, inflamables, explosivos, valiosos o volátiles (p. ej. gases licuados). Además son apropiadas para el transporte de productos extremadamente calientes o fríos así como de líquidos sometidos a presiones elevadas o a vacío.
Se trata de una bomba centrífuga cerrada en sí misma, sin sellado del árbol, que es impulsada electromagnéticamente por un motor provisto de diafragma. Por su construcción es totalmente hermética y no requiere prácticamente mantenimiento. Para refrigerar el motor y lubricar los cojinetes de fricción, así como para la compensación hidráulica del empuje axial, se deriva una parte del caudal principal y se hace pasar por un filtro autolimpiable. Después de atravesar el árbol hueco y el recinto del rotor, el caudal de refrigeración vuelve al caudal principal en el lado de descarga.